La
comunicación es el intercambio de información entre dos o más personas. Esta
puede ser verbal, por ejemplo cuando dos personas conversan, o puede ser
no-verbal, como la expresión en la cara de una persona que probablemente le
hará saber a otra que está enojada. La comunicación puede ser positiva,
negativa, efectiva o
inefectiva.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-4iFP9KIKYFS6V_ipahsvdPswmPuE4qWfGawGEf_oqTG8opgRC-RRn1RLr1R0oNjVmxMfIQQwszfT2MGLEZOIwmtHV2uNPfVXmARCNztyJdFCkXfTWTPs8Zrpk4sIg1LpZJ2dOExVp0mg/s1600/foto-escuela-padres%255B1%255D_1.jpg)
Los niños
aprenden a comunicarse observando a los padres. Si los padres se comunican
abierta y efectivamente, es posible que sus hijos lo hagan también. La
habilidad de comunicarse beneficiará a los niños toda su vida. Los niños se
empiezan a formar sus ideas y opiniones de si mismos basadas en lo bien que los
padres se comunican con ellos. Cuando los padres se comunican efectivamente con
sus hijos, les demuestran respeto. Los niños empiezan a sentir que sus padres
los escuchan y los comprenden, lo cual les aumenta su amor propio. Por el
contrario, si la comunicación entre padres e hijos es inefectiva o negativa,
puede hacer que sus hijos piensen que no son importantes, que nadie los escucha
y nadie los comprende. Estos niños pueden también pensar que sus padres no son
de gran ayuda y no son de confianza.
Cuando los
padres se comunican bien con sus hijos es más probable que sus niños estén
dispuestos a hacer lo que se les pide. Estos niños saben lo que esperan de sus
padres, y una vez que saben lo que se espera de ellos, es más probable que lo
cumplan. Estos niños son mas aptos a sentirse mas seguros de su posición en la
familia, y es posible que sean mas cooperativos.
Maneras
de Comunicarse Efectivamente Con Los Niños
*Empiece
la comunicación efectiva cuando los niños están chicos. Antes de que los padres y los hijos puedan comunicarse, deben sentirse
cómodos al hacerlo. Cuando los niños están chicos, los padres deben empezar a
cimentar la comunicación abierta y efectiva. Esto puede lograrse cuando los
padres están disponibles para contestar preguntas, o para platicar con sus
hijos. Además, los padres que proveen a sus hijos con plenitud de amor,
entendimiento y aceptación, ayudan a crear un buen ambiente para la
comunicación franca. Los niños que se sienten amados y aceptados por sus padres
son mas capaces de compartir sus sentimientos, pensamientos y preocupaciones
con ellos.
A veces es
más fácil para los padres sentir aceptación por sus hijos que demostrarla.
Ellos deben hacerle saber a sus hijos que los aman y aceptan. Esto se puede
lograr de manera verbal y no verbal. Los padres pueden hacer saber a sus hijos
verbalmente que los aceptan por medio de lo que dicen. Ellos deben tratar de
mandar mensajes positivos a sus hijos. Por ejemplo, cuando el niño recoge sus juguetes
una vez que ha terminado con ellos, los padres pueden hacerle saber que lo
aprecian diciendo algo como, "Me gusta cuando recoges tus juguetes sin que
yo te lo pida." Cuando los padres platican con sus hijos, deben tener
cuidado con lo que dicen y la manera que lo dicen. Todo lo que un padre le dice
a su hijo envía un mensaje de la opinión que ellos tienen de sus hijos. Por
ejemplo, si el padre dice algo como, "No me molestes. Estoy ocupado,"
sus hijos pensarán que sus necesidades no son importantes.
No
verbalmente, los padres pueden demostrar su aceptación a sus hijos por medio de
ademanes, expresiones faciales, y otras señales no verbales. Los padres deben
eliminar los gritos, y prestarle mas atención a sus hijos. Esta conducta
interfiere con la comunicación efectiva. La práctica hace al maestro: Los
padres deben aprender a demostrar aceptación en formas que los niños
entenderán.
*Comuníquese
al nivel del niño. Cuando los
padres se comunican con sus hijos, es importante que lo hagan al nivel del niño,
verbal y físicamente. Verbalmente, los padres deben tratar de usar lenguaje
apropiado a la edad de sus hijos para que puedan entender.
Con niños
mas chicos, esto se puede lograr usando palabras simples. Por ejemplo, los
niños pequeños entienden mejor si se les dice, "No golpees a tu
hermana," en lugar de "No es aceptable que golpees a tu
hermana." Los padres deben saber lo que sus hijos pueden entender y no
deberían tratar de comunicarse en maneras que sus hijos no podrán entender.
Físicamente, los padres no deben, por ejemplo, encumbrarse sobre sus hijos
cuando se comunican con ellos. En cambio, deben tratar de ponerse al nivel del
niño ya sea de rodillas, sentados o agachados. Esto facilitará el contacto con
la mirada y los niños se sentirán menos intimidados por los padres cuando se
miran cara a cara.
*Aprenda
a realmente escuchar. Escuchar es una habilidad que se debe aprender y practicar. Escuchar
es una parte muy importante de la comunicación efectiva. Cuando los padres
escuchan a sus hijos les están mostrando que están interesados y que ponen
atención a lo que sus hijos tienen que decir. A continuación se ofrecen unos
consejos para convertirse en mejores escuchas:
>Haga y
mantenga el contacto con la mirada. Los padres que hacen esto les demuestran a sus hijos que están
interesados. Si no se hace contacto con la mirada, los niños pueden pensar que
sus padres no están interesados en lo que dicen.
>Elimine
las distracciones. Cuando los
niños expresan el deseo de platicar, los padres deben brindarles su atención
completa. Deben poner a un lado lo que están haciendo, mirar a sus hijos y
ponerles atención. Si los padres por ejemplo, continúan leyendo al periódico, o
mirando la televisión cuando sus hijos tratan de comunicarse, los niños pueden
pensar que sus padres no están interesados en lo que tienen que decir o que no
es importante. Si los niños desean comunicarse y los padres no pueden, los
padres deben planear una hora después para platicar con ellos.
>Escuche
con la boca cerrada. Los padres
deben tratar de interrumpir lo menos que se pueda cuando sus hijos hablan.
Pueden ofrecer apoyo por medio de una sonrisa o una caricia, sin interrumpir.
Las interrupciones a menudo hacen que la persona que habla pierda su
concentración, lo que es muy frustrante.
>Haga
saber a sus hijos que han sido escuchados. Una vez que los niños han terminado de hablar, los padres pueden
mostrarles que han prestado atención repitiendo lo que acaban de escuchar, con
palabras diferentes, por ejemplo, "Parece que tuviste un día muy bueno en
la guardería." Esto no solo les indica que sus padres han estado
escuchando. También es una oportunidad de aclarar las cosas si los padres no
entendieron algo o interpretan mal lo que sus niños tratan de decir.
*Mantenga
las conversaciones breves. Entre mas
chicos son los niños, mas difícil es que pongan atención a sermones largos. Una
buena regla es que los padres hablen con sus hijos por 30 segundos, luego
pregúnteles algo o pida su opinión de lo que se ha hablado. El objetivo es que
los padres pasen información a sus hijos poco a poco y cerciorarse que los
niños están atentos y comprenden lo que se les dice. Los padres deben
permitirles a sus hijos que decidan cuando algo es demasiado. Deben buscar
señales de que sus hijos han tenido suficiente. Estas incluyen la inquietud,
falta de contacto visual, y distracción. Los padres deben saber cuando
comunicarse con sus hijos, pero deben también saber cuando terminar.
*Haga
preguntas indicadas. Algunas
preguntas ayudan a mantener el curso de una conversación, mientras que otras la
pueden parar en seco. Los padres deben tratar de hacer preguntas fáciles de
contestar en sus conversaciones con sus hijos. Estas preguntas requieren a
menudo respuestas detalladas que mantendrán la conversación interesante. Preguntas
abiertas que comienzan con las palabras "qué", "cuando",
"quién", o "como", son a menudo muy instigantes para que los niños se sientan cómodos. Los
padres deben evitar las preguntas que solo requieren respuestas de SI o NO.
Aunque hacer preguntas indicadas ayuda en la conversación, los padres necesitan
tener cuidado de no hacer muchas preguntas cuando conversan con sus hijos.
Cuando esto sucede, las conversaciones se convierten en interrogatorios y los
niños no se interesarán en participar.
*Exprese
sus ideas y opiniones con sus hijos cuando se comunique con ellos. Para que la comunicación sea efectiva, debe haber dos lados. No solo
los padres deben estar disponibles para sus hijos y listos a escucharlos, para
que la comunicación efectiva tome lugar; también deben estar preparados para
compartir ideas y sentimientos con sus hijos. Los padres pueden enseñar a sus
hijos muchas cosas, por ejemplo, morales y valores, expresando sus ideas y
opiniones. Cuando comparten sus ideas, sin embargo, deben tener cuidado de no
hacer juicios. Parece lógico que entre más francos sean los padres con sus
hijos, más francos serán los hijos con sus padres.
*Planeé
regularmente juntas de familia o tiempo para platicar. Una forma muy útil para las familias de comunicarse efectivamente con
niños mas crecidos es planear juntas para platicar. Esto se puede lograr de
varias formas. En primer lugar, existe la junta familiar. Esta junta puede
planearse una vez a la semana y/o cuando hay algo que la familia debe discutir.
La familia puede utilizar estas juntas para discutir detalles cotidianos, como
tareas, horas de volver a casa y horas de acostarse. Estas juntas familiares
también son una buena oportunidad para discutir quejas y problemas. Este tiempo
también se puede utilizar para hablar de cosas positivas que han ocurrido
durante la semana. Lo importante es que cada miembro de la familia tenga tiempo
para hablar y ser escuchado por los demás.
El horario
regular para platicar y comunicarse no tiene que ser tan formal como la junta
familiar. Por ejemplo, las familias pueden utilizar la hora de la cena para
enterarse de lo que sucede con los demás. O los padres pueden hacer tiempo para
tomar parte en juegos de comunicación, como escoger temas específicos de discusión
y darle a cada uno en la familia la oportunidad de expresar su opinión. Lo que
importa es que la familia aparte tiempo regularmente para comunicarse con uno y
otro.
*Admita
cuando usted no sabe algo. Cuando los
niños hacen preguntas que los padres no pueden contestar, los padres pueden
admitir que no saben la respuesta. Pueden también utilizar estas ocasiones como
lecciones. Por ejemplo, los padres pueden enseñar a sus hijos a encontrar
información en la biblioteca, en las enciclopedias, etc. Es mucho mejor que los
padres demuestren a sus hijos que ellos son humanos y que no saben todo, que
inventar alguna respuesta que puede ser falsa.
*Trate de
dar explicaciones completas. Al contestar las preguntas de los niños, los padres deben proveer
tanta información como sea necesaria, aunque los temas sean de algo que los
padres no se sienten cómodos para hablar. Esto no significa que los padres
tienen que describir detalle por detalle. Solo que es importante es que los
padres sepan cuanta información necesitan sus niños y proveérsela. Los padres
deben asegurarse de que esta información sea apropiada a la edad de lo niños.
También deben alentar a los niños a que hagan preguntas. Esto ayudará a los
padres a enterarse del tipo de información que buscan los niños. No dar
información suficiente puede tener como consecuencia que los niños se formen
criterios que no son necesariamente verdaderos.
Comunicación
Durante Conflictos
Todas las
familias tendrán conflictos una que otra vez. Aunque los conflictos pueden ser
desconcertantes, no tienen que distraer mucho. Hay varias cosas que los padres
pueden hacer para aminorar los conflictos y al mismo tiempo mantener abiertas
las líneas de comunicación. A continuación se ofrecen algunas sugerencias.
*Resuelva un
problema a la vez. Durante
los conflictos, es mejor tratar de resolver un problema a la vez. No es buena
idea discutir varios temas al mismo tiempo. Esto puede ser confuso para padres
e hijos. Cuando esto sucede las familias pierden rápido la mira de los temas
importantes.
*Busque
maneras creativas de resolver los problemas. Cuando se trata de resolver conflictos, los padres deben tener en
cuenta que existe mas de una solución para cada problema. Padres e hijos deben
trabajar juntos para encontrar soluciones que sean satisfactorias para ambos.
La flexibilidad para resolver problemas es una habilidad muy buena que los
niños pueden aprender. Si una solución no funciona, los padres deben tratar de
ser suficientemente flexibles para encontrar otra.
*Sea cortés. Los padres no deben olvidar las reglas comunes de cortesía solo porque
se trata de sus hijos. Durante los conflictos, o quizás en otras ocasiones, los
padres deben tratar a sus hijos con el mismo respeto con que tratarían a
cualquier otra persona. Los niños son personas también, y por lo tanto merecen
ser tratados con respeto. A veces durante el calor de la discusión o el
desacuerdo, los padres les dicen cosas a sus hijos que nunca dirían a otro
pariente o amistad cercana. Los padres deben hacer el esfuerzo de no hacer
esto.
*Utilice
mensajes de "YO". Cuando se discuten los conflictos con sus hijos, los padres deben
siempre tratar de referirse a los problemas conforme a su opinión. Por ejemplo,
en lugar de decir "Tú nunca recoges la ropa como se supone," los
padres pueden decir "Yo me siento frustrado cuando tu no recoges tu
ropa." Al usar "Yo", los padres les expresan a sus hijos como
los hace sentir su conducta, en lugar de acusarlos o humillarlos. Hablando de
"YO" es efectivo con los niños porque ellos no tienden a rebelarse
contra algo que se les dice con respecto a la manera de sentir de los padres.
Cuando se les dice algo con respecto a los sentimientos del padre, los niños se
sienten menos amenazados que si se les habla con acusaciones y/o culpa.
Hablando de "YO" también enseña a sus hijos a ser responsables por
sus actos. Los padres que expresan sus sentimientos de tal manera enseñan a sus
hijos a comportarse así también.
*Esté
dispuesto a perdonar. Enseñe a
sus hijos a perdonar, haciéndolo usted mismo.
Como
Evitar La Comunicación Negativa
Desafortunadamente,
muchos padres no están conscientes de cuantas veces utilizan formas negativas
para comunicarse con sus hijos. Esto padres pueden, como resultado, estar
plantando la semillas de la desconfianza y el bajo nivel de amor propio de sus
hijos. Es por esto que es importante que los padres se enteren y corrijan
cualquier forma de comunicación negativa que usan con sus hijos. A continuación
se ofrece una lista de ejemplos de mala comunicación. Los padres deben revisar
esta lista e identificar las tendencias que son familiares. Después de
identificar las áreas problemáticas, los padres pueden empezar a hacer cambios.
Recuerde que esta lista no contiene todos los ejemplos de comunicación
negativa. Hay quizás muchas formas de comunicación que se consideran negativas
que no están incluidas en esta lista.
Ejemplos
De Comunicación Negativa Que Los Padres Deben Evitar
*Fastidios
y sermones. Fastidiar
es repetir algo que ya se ha dicho. Sermonear es dar más información de la que
es necesaria sin dar cabida a otras opiniones o ideas. Los padres pueden evitar
fastidios y sermones manteniendo breves las conversaciones con sus hijos.
También deben tener en cuenta que una vez que les han dicho algo a sus hijos,
no es necesario decirlo de nuevo. En lugar de fastidiarlos, los padres pueden
usar otra consecuencia, como un tiempo de descanso, cuando sus hijos no hacen
algo que se les ha pedido. Fastidiar y sermonear hacen que los niños dejen de
escuchar o se pongan a la defensiva o se sientan resentidos.
*Interrupciones. Cuando los niños estén hablando, los padres deben darles la
oportunidad de terminar lo que están diciendo antes de que ellos hablen. Es una
regla de cortesía. Los niños que sienten que no son escuchados, pueden dejar de
tratar de comunicarse con sus padres por completo.
*Críticas. Los padres no deben de criticar los sentimientos, las opiniones o
ideas de sus hijos. A menudo los niños miran esto como un ataque, lo que
resulta en poco amor propio. Cuando sea necesario, los padres deben criticar
cierta conducta, o lo que sus niños han hecho, pero no critique al niño mismo.
*Viviendo
en el pasado. Una vez
que el problema o conflicto se ha resuelto, los padres deben tratar de no
mencionarlo otra vez. A los niños se les debe permitir volver a empezar. Los
padres que mencionan constantemente los errores que sus hijos han cometido en
el pasado, están enseñando a sus hijos a guardar rencores por mucho tiempo.
Además, los niños deben saber que una vez que un problema ha sido resuelto,
permanecerá resuelto.
*Tratar de
controlar a sus hijos usando sentimientos de culpabilidad. Esto incluye intentar que los niños se sientan culpables por sus
opiniones, sentimientos y/o acciones. Los padres que usan la culpabilidad para
controlar
a sus hijos pueden hacer un gran daño a su relación con ellos.
*Usar
sarcasmo. Los padres
están usando sarcasmo cuando dicen algo que no quieren decir, o insinúan lo
opuesto a lo que dicen por el tono de su voz. Un ejemplo sería un padre
diciendo "Oh, qué gracioso eres," cuando un niño
rompe algo. El sarcasmo hiere a los niños y nunca sirve cuando los padres
tratan de comunicarse efectivamente con sus hijos.
*Decirle a
sus hijos como resolver sus problemas. Esto sucede cuando los padres intervienen y les dicen a sus hijos como
hacer las cosas, en lugar de dejarlos que busquen soluciones a sus problemas.
Los padres que le dicen a sus hijos como resolver sus problemas, pueden hacer creer
al niño que el no tiene ningún control sobre su propia vida. Estos niños pueden
acabar creyendo que sus padres no les tienen confianza. O, pueden ofenderse
cuando se les dice lo que deben hacer y como resultado se rebelan contra los
consejos de sus padres.
*Hacer a
los niños sentirse menos. Las
humillaciones toman diferentes formas, como nombres ofensivos, ridiculizar, hacer
juicio, culpabilidad, etc. Las humillaciones perjudican la buena comunicación,
también dañan el amor propio de los niños. Los niños que son humillados por sus
padres a menudo se sienten rechazados, no amados, e incapaces.
*Amenazar. Las amenazas rara vez son efectivas. A menudo hacen que los niños se
sientan sin poder y se resienten con sus padres.
*Mentir. No importa que tan grande sea la tentación de inventar una mentira
para evitar, por ejemplo, hablar del sexo, los padres nunca deben mentir.
Deberían tratar de ser francos y honestos con sus hijos. Esto hará que sus
hijos también sean francos y honestos con sus padres. Además, los niños son muy
perspicaces. Son muy buenos para presentir si sus padres son totalmente
honestos con ellos. Esto puede causar desconfianza.
*Negarles
sus sentimientos a los niños. Cuando los niños les dicen a sus padres como se sienten, los padres no
deben de tomarlo a la ligera. Si por ejemplo, el padre piensa que el niño no
debería estar triste por haber perdido un juego de basquetbol, no debería decir
nada. Puede en cambio decir algo que ayude, por ejemplo, "Yo se que tu
querías realmente ganar. A veces es difícil perder." Con niños mas
pequeños, esto se puede lograr con palabras mas sencillas y directas. Los niños
necesitan que sus padres apoyen sus sentimientos. Los padres necesitan
demostrar apoyo a sus hijos cuando se trata de sus sentimientos. Si no, sus
hijos se sentirán mal entendidos por sus padres.
Forjando
la Buena Comunicación
Aquí hay
algunos ejemplos de cosas que los padres pueden decirle a sus hijos para ayudar
a abrir las líneas de comunicación.
"Me
gustaría saber mas del asunto."
"Dime
más acerca de esto."
"Habla.
Yo escucho."
"Yo
entiendo."
"Qué
piensas tú de…."
"¿De
qué te gustaría hablar?"
¿Hay algo
más de lo que quieres hablar?
"Eso
suena interesante."
"Me
interesa."
"Explícamelo
por favor."
La
comunicación franca y efectiva toma mucho trabajo y práctica. Los padres deben
recordar que no son perfectos. Ellos cometen errores. Lo que importa es que los
padres se esfuercen a comunicarse efectivamente con sus hijos, desde que estos
son pequeños. El resultado será una relación mas cercana y positiva entre los
padres y sus hijos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario