miércoles, 19 de septiembre de 2012

COMO SALIR DE DEUDAS


Si queremos mejorar nuestra situación financiera, una decisión importante que debemos tomar es la de salir de nuestras deudas.
Las deudas son un problema que aqueja a muchas personas hoy en día, ello debido, sobre todo, a que cada vez existen más empresas que otorgan créditos de consumo, y a que cada vez existen mayores facilidades para acceder a estos créditos.
Puede que algunas deudas sean necesarias tales como las deudas contraídas para adquirir una vivienda o una inversión; pero otros tipos deudas, tales como las deudas contraídas por préstamos personales no hacen más que impedirle a las personas crecer financieramente.
Estrés por deudas económicas aumenta riesgo de padecer cáncer y otros males
El estrés generado por las deudas económicas, así como la depresión y ansiedad por la falta de dinero aumentan el riesgo de contraer cáncer y otros males físicos entre las personas con predisposición a enfermarse y a desarrollar males oncológicos, asegura La directora de Salud Mental del Ministerio de Salud.
“El estrés aumenta la vulnerabilidad psicosomática. En el adulto perdura y se percibe como una situación "inescapable". Si una persona tiene deudas, pierde el trabajo o afronta otro problema, esto puede hacer que sus defensas bajen”, expresó.
Si bien es cierto, algunas personas son más vulnerables que otras ante este tipo de situaciones, hay quienes no las resisten y se enferman mentalmente, padecen de ansiedad o depresión y esto podría desencadenar un trastorno de carácter clínico, remarcó la especialista.
Agregó que el estrés no resuelto y la depresión son enfermedades sistémicas que afectan el sistema emocional y el sistema inmune. Ello puede generar que las personas se resfríen más seguido, sufran de migrañas, insomnio, presión alta y hasta males cardiacos y digestivos.
¿CÓMO COMBATIRLO?
En líneas generales se puede atenuar el estrés con algunos cambios en el estilo de vida. Por ejemplo, empezar por consumir una alimentación saludable y bien balanceada, al igual que dormir bien y hacer ejercicio.
Asimismo, se sugiere reducir la cafeína, la ingesta de alcohol y el cigarrillo y evitar la cocaína y otras drogas psicoactivas. También practicar deportes como Soft ball, Foot Ball, Ciclismo, Natación entre otros.
Se puede intentar equilibrar las actividades divertidas con el trabajo y los deberes familiares, programando un poco de tiempo libre todos los días para pasar tiempo con la familia
De igual forma, es recomendable aprender a hacer trabajos manuales, tocar un instrumento, escuchar música o simplemente hablar con un amigo o un ser querido, lo que es de mucha ayuda.
Si en estos momentos tienes un alto nivel de endeudamiento y quieres remediar tu situación, o simplemente quieres reducir tus deudas y liquidarlas lo más pronto posible, te presentamos a continuación un método conformado por 8 pasos que te permitirá salir de tus deudas:
1. Conocer tus deudas
El primer paso consiste en informarte bien sobre las deudas que tienes en estos momentos.
Para ello, debes elaborar una lista en donde señales quiénes son tus acreedores (a quiénes les debes), cuánto te falta pagarles (el saldo de las deudas), cuáles son los costos de cada deuda (las tasa de interés que te cobran), el pago mínimo que te exigen, y la fecha en que debes realizar los pagos.
Esta lista, en una primera instancia, te dará una idea del monto total que debes (la suma de todas tus deudas), te servirá para planificar el pago de tus deudas, y te servirá como motivación para salir de éstas y cumplir con lo planificado.
2. Dejar de adquirir más deudas
El siguiente paso consiste en dejar de seguir adquiriendo más deudas.
Si quieres salir del hoyo en que estás, debes dejar de seguir cavando; si quieres salir del problema de tus deudas, debes dejar de seguir adquiriéndolas.
Por tanto, debes dejar de usar las tarjetas de crédito, dejar de solicitar más préstamos o créditos personales o de consumo, y dejar de comprar al crédito.
Debes adquirir la costumbre de comprar al contado, y si no puedes comprar algo al contado, simplemente no debes comprarlo.
3. Buscar mayores ingresos de dinero
El siguiente paso consiste en buscar mayores ingresos de dinero que te ayuden a pagar tus deudas.
Para ello, podrías buscar un aumento de suelo, buscar un mejor empelo, aumentar las ventas de tu negocio, o buscar nuevas fuentes de ingresos, etc.
Podrías también buscar algún dinero adicional, por ejemplo, al realizar algún trabajo extra, o al vender algún activo que poseas.
Otra alternativa podría ser pedir un préstamo familiar, un préstamo a tu empresa, o un préstamo al banco en donde te cobren una tasa de interés menor a la tasa de interés que debes pagar por tus deudas, por ejemplo, un préstamo sobre el valor de tu propiedad.
4. Reducir gastos
Puede que buscar mayores ingresos de dinero te resulte una tarea complicada en el corto plazo, pero algo que es muy probable que sí puedas hacer es reducir tus gastos.
Para reducir tus gastos debes buscar siempre la manera de gastar menos, evitar gastos innecesarios, y consumir menos.
Por ejemplo, podrías procurar comprar algunos artículos usados en vez de nuevos, comer más seguido en casa, buscar siempre ofertas o descuentos, comparar bien precios antes de comprar algo, consumir menos electricidad y energía, etc.
Una forma de ayudar a reducir y controlar tus gastos es elaborando un presupuesto personal.
5. Negociar deudas
El siguiente paso consiste en negociar tus deudas con tus acreedores.
Para ello, debes comunicarte con tus acreedores, ser sincero con ellos, explicarles tu situación, y buscar algún acuerdo favorable que te permita reducir tu deuda u obtener mayores facilidades para pagarla.
Luego de negociar con ellos, es probable que te sorprendas de las facilidades que muchos de ellos te darán, ya sea una disminución de la tasa de interés, una disminución de los pagos mensuales (por ejemplo, al extender el plazo de la deuda), una eliminación de recargos, un congelamiento en los pagos, e, incluso una disminución de la deuda (por ejemplo, al pagar una parte al contado).
6. Consolidar deudas
Un paso opcional, en caso de que tengas varias deudas consiste en consolidarlas.
La consolidación de deudas consiste en agrupar todas las deudas personales (saldos de tarjeta de crédito, préstamos personales, etc.) en una sola.
Al consolidar tu deuda, no sólo logras simplificar los pagos de tus deudas (ya que sólo tendrías que realizar un solo pago mensual), sino que te permite lograr disminuir las cuotas mensuales (ya que te permite extender el plazo de la deuda) y, sobre todo, disminuir tu deuda (ya que te permite una tasa de interés menor a las tasas de interés de tus demás deudas).
Para consolidar tus deudas, debes acercarte al banco y solicitar un préstamo de consolidación de deudas, a una empresa de tarjeta de créditos y solicitar que consoliden todas tus tarjetas de crédito en una sola, o a cualquier entidad financiera que ofrezca este servicio.
7. Determinar un monto para el pago de deudas
El siguiente paso consiste en determinar un monto de dinero con el cual puedas pagar tus deudas.
Este monto debe ser suficiente para cubrir el pago mínimo de tus deudas, pero también debe permitirte realizar pagos adicionales que te permitan cancelar tus deudas lo más pronto posible.
Para determinar este monto, también es recomendable guiarte de un presupuesto personal; por ejemplo, podrías determinar que este monto esté conformado por la diferencia entre tus ingresos y egresos mensuales (saldo mensual), o determinar que corresponda a un porcentaje del total de tus ingresos, por ejemplo, al 10%.
Si luego de hacer tu presupuesto, no logras obtener un monto que cubra los pagos mínimos de tus deudas, o que no te sea suficiente para acelerar la cancelación de éstas, debes buscar mayores ingresos de dinero, o buscar reducir aún más tus gastos.
Un consejo es que si tu nivel de deudas es muy elevado, no destines todo tu saldo mensual al pago de tus deudas, sino que destines una parte también a la creación de una bolsa de ahorro que puedas utilizar en caso de emergencia o para futuras inversiones.
La razón de ello, es que si destinas todo tu saldo mensual al pago de tus deudas, con la idea de recién empezar a ahorrar después de haber saldado todas tus deudas, probablemente pasen varios años antes de que empieces a ahorrar para el futuro (lo cual es contraproducente), y probablemente te desanimes pronto y nunca llegues a la parte del ahorro.
En cambio, si pagas tus deudas, a la vez que ahorras dinero, sentirás que estás progresando financieramente.
8. Pagar las deudas
Una vez que hayas determinado el monto que será destinado al pago de tus deudas, el siguiente y último paso para salir de tus deudas consiste en empezar a pagarlas.
Con el monto que has destinado para el pago de tus deudas, debes pagar los montos mínimos (para evitar las moras), y con el dinero que reste (que debe ser el mayor posible), debes ir cancelando tus deudas, empezando por aquellas que tengan el mayor costo, es decir, las que tengan la mayor tasa de interés.
Aunque una alternativa es empezar cancelando las deudas en las que te falte menos por pagar, es decir, las que tengan un menor saldo, de modo que puedas librarte rápidamente de las pequeñas deudas, y así sientas una mayor motivación para la cancelación de las demás.

Consejos sobre: Como salir de deudas.
Existen tres métodos que sirven para determinar qué deuda se debe pagar primero.
o    Dar prioridad a la deuda con la tasa de interés más alta. El pago de la deuda con la tasa de interés más alta te dará la mayor rentabilidad de tu dinero a largo plazo.
o    Dar prioridad a la deuda mas grande. Priorizar esta deuda y terminar de pagarla lo más pronto posible te proporcionara una sensación de alivio.
o    Dar prioridad a la deuda mas pequeña primero. El principal beneficio es que obtendrás la sensación que estas avanzando con tus deudas, además que tendrás menos cuentas que pagar.
Se el primero en llamar.
No esperes a que tus acreedores te acosen te contacten. Se tú el primero en llamar. Ponte en contacto con tus acreedores y trata de negociar una reducción de tu tasa de interés. Déjales saber que estas interesado en salir de tus deudas. Los acreedores estarán dispuestos a negociar contigo para darle solución al problema.
¿Puedo ganar más dinero?
Todas las personas tienen la capacidad de aumentar sus ingresos aunque sea un poco. No es necesario que crees una empresa o inicies un negocio. Simplemente busca la forma de generar ingresos extras.
Trabaja todos los días.
Salir de deudas no se logra de un día para el otro, puedes tardar meses o inclusive años dependiendo de qué tan grande es el monto que debes o que tan buenos o no son tus ingresos. El punto es que es un esfuerzo diario.

Aprende a trabajar con el Dinero de Otros.

No gastes tu Dinero, en cosas que no generan ganancia, por Ej. Un auto de lujo, eso te generará gastos, en cambio compras un Camión y lo pones a trabajar y generará ingresos para pagarse y te dejará ganancia. No te descapitalices, trabaja con Créditos Bancarios y siempre tendrás tu reserva de capital. Esta también es una forma de salir de Deudas.

Consejo Final
 Paga tus Diezmos a Dios.
Cuando el hombre le roba a Dios nunca prospera, y siempre tendrá deudas, si realmente quieres ser libre de Deudas y ser prosperado cumple con este principio Bíblico y Veras los resultados. Malaquías 3:6-11. (Biblia Lenguaje Sencillo) Óiganme, israelitas: Si ustedes no han sido
destruidos es porque yo soy el Dios todopoderoso y mi amor no cambia.   En cambio ustedes, desde los días de sus antepasados, siempre han desobedecido mis mandamientos.
    Pero si ustedes se arrepienten y vuelven a mí, yo también me volveré a ustedes. Yo soy el Dios todopoderoso, y les aseguro que así lo haré. Ustedes me preguntan: “¿Y de qué tenemos que arrepentirnos?”
 Yo les respondo: “No es fácil que alguien me robe; sin embargo, ¡ustedes me han robado!”
Todavía se atreven a preguntarme: “¿Y qué te hemos robado?” Pues escúchenme bien: ¡Me han robado porque han dejado de darme el diezmo y las ofrendas!
Todos ustedes, como nación, me han robado; por eso yo los
maldigo a todos ustedes, también como nación.
Traigan a mi templo sus diezmos, y échenlos en el cofre de las ofrendas; así no les faltará alimento. ¡Pónganme a prueba con esto! Verán que abriré las ventanas del cielo, y les enviaré abundantes lluvias.
Además, alejaré de sus campos las plagas de insectos que destruyen sus cosechas y sus viñedos. Tendrán entonces un país muy hermoso, y todas las naciones los considerarán muy dichosos. Yo soy el Dios todopoderoso, y les juro que así lo haré.
Dios te promete que lo hará Créele a Dios y todas tus deudas y pobreza se irá de tu vida. Amen.
¡Llego la hora de disfrutar de tu nueva vida libre de deudas! Dios Te Bendiga

martes, 11 de septiembre de 2012

Las respuestas de Dios ante los Problemas cruciales de la vida moderna.



 La Depresión en Cristo tiene solución

Heb 12:12–17 12Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; 13y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado. 14Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. 15Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados; 16no sea que haya algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura. 17Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas.
INTRODUCCIÓN: Cifras conservadoras muestran que más del 30% de las personas padecen cuadros depresivos u otra enfermedad mental. Eso quiere decir que 90 millones de personas en Estados Unidos presentan desordenes emocionales que, mirando al futuro, nos obliga a percibir un panorama muy peligroso para una nación que por su potencial bélico necesita líderes equilibrados para tomar decisiones correctas porque está en juego la tranquilidad mundial.
Los números, en términos económicos, muestran que las naciones desarrolladas gastan millones de dólares y euros en atender a una población emocionalmente inestable que se multiplica y reclama atención médica o ayuda profesional.
En Estados Unidos, la depresión se ha convertido en una de las enfermedades más comunes, que llega a afectar cada año a una décima parte de los adultos en edad de trabajar.
La depresión es un trastorno emocional que se caracteriza por alteraciones del humor, tristeza, baja autoestima, cansancio, insomnio, pensamientos negativos y que le impide desarrollar con normalidad las actividades de la vida diaria.
Estas cifras nos permiten decir abiertamente que, en una Iglesia, con una membresía de 100 miembros, más de 30 padecen este mal que puede resultar incomprensible en personas que tienen la responsabilidad de compartir la paz de Cristo, cuando ellos mismos no la tienen ni confían en el poder del Señor que ellos anuncian.
Hay dos maneras de atender el problema. La primera es ignorarlo, que no permite ni el tratamiento ni la sanidad. En segundo lugar, afrontarlo, buscando la ayuda necesaria, tanto espiritual como profesional.
¿Tiene la Biblia el consejo de Dios para vencer la depresión? Permitamos que el Señor nos brinde la ayuda para encontrar respuesta a uno de los problemas más cruciales de la vida moderna, usando este texto de la Carta a los Hebreos para escuchar lo que Dios nos dice, porque “Dios es nuestro sanador”.
1. DEBEMOS RECONOCER QUE TENEMOS PROBLEMAS. Hebreos 12:12-13
12 Por lo tanto, restauren las manos debilitadas y las rodillas paralizadas;
No hay duda que antes de buscar ayuda tenemos que confesar que existe un problema emocional que nos está afectando, incluidos pastores y líderes espirituales. Una carga emocional lleva al creyente, no importa su jerarquía eclesiástica, a que sus manos se debiliten y que sus rodillas se paralicen, esto no tiene otra manifestación que la desesperación y el desaliento.
La depresión no reconocida, no confesada, lleva al desastre, porque se convierte en una adicción, a acostumbrarse a vivir con ella, al punto que no busquemos ni deseemos salir de ese estado.
Hace poco asistí a una conferencia pastoral en la que se trató el tema de la salud emocional entre pastores, las cifras son honestamente impublicables. La explicación es que los pastores vivimos en el mismo mundo que los fieles, en una época que ha sido denominada como la “Era de la ansiedad”.
El consejo de Dios es claro: Restauración. Usemos el texto del griego del Nuevo Testamento para tener una mejor explicación de lo que Dios está diciendo en Su Palabra. νορθώσατε, (anorthósate) cuya raíz es νορθόω (anorthoō): reconstruir, restaurar, reedificar, enderezar, erguir de una posición torcida, recibir ánimo, literalmente fortalecer.
Dios promete efectuar la restauración. Jeremías 15; 19-20: "Por tanto, así ha dicho el Señor: —Si tú vuelves, yo te restauraré, y estarás de pie delante de mí. Te pondré ante este pueblo como un muro fortificado de bronce. Lucharán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estaré contigo para salvarte y librarte, dice el Señor."
Volverse a Dios es dejarse guiar por la Palabra, medio por la cual el Espíritu Santo nos lleva a reconocer nuestro estado, a confiar en el Señor y Él, por su gracia nos restaura, nos declara vencedores y nos promete que estará con nosotros para salvarnos y librarnos.
¿Cómo Dios nos da la sanidad? 13 y enderecen para sus pies los caminos torcidos, para que el cojo no sea desviado, sino más bien sanado. La acción del Espíritu Santo trae como resultado que nuestros pies, nuestra vida es enderezada por el Señor, no hay posibilidad de desvío bajo su dirección, no hay cojera depresiva que nos mate la vida espiritual, que nos robe la alegría, porque la sanidad del Señor fluirá, estará a la vista.

2. PROCURAR LA PAZ Y LA SANTIDAD. Hebreos 12:14-17
14 Procuren la paz con todos, y la santidad sin la cual nadie verá al Señor.
¿Es posible tener Paz y Santidad? La respuesta es no, porque el pecado ha contaminado la totalidad del ser humano y eso afecta la relación entre los hombres y Dios y entre las personas entre sí.
La Palabra de Dios explica cuáles son los obstáculos para estar en paz y santidad, nos muestran las manifestaciones de la condición de pecadores que nos impide alcanzar, por nuestros propios medios, la gracia de Dios o, en el caso de los creyentes, caer de ella,
(1)15 Miren bien que ninguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que ninguna raíz de amargura brote y cause estorbo, y que por ella muchos sean contaminados.
La primera barrera encontrada en el texto, que bloquea la paz y santidad es: La amargura que se da en la esfera de las emociones y causa trastornos severos de conducta. La amargura es definida como un estado de aflicción y disgusto permanente.
La raíz de la amargura es la ofensa, somos ofendidos y no perdonamos, guardamos el resentimiento. Como no perdonamos la ofensa, empezamos a odiar al que nos ofendió. La combinación de odio y resentimiento nos convierte en amargados. La amargura es un veneno que nos daña más a nosotros que al ofensor, porque nos lleva a la soledad y la soledad a la depresión. La negativa de dar perdón priva a la persona de recibir el perdón de Dios. La Biblia es clara, “si no perdonamos a los hombres sus ofensas, tampoco Dios nos perdonará a nosotros las nuestras”. Lo decimos en el Padre Nuestro, “Perdona nuestras ofendas, porque ya yo he perdonado a los que me han ofendido”.
El consejo de Dios es claro: “Ve y reconcíliate, primero con tu hermano”. Con la reconciliación viene la paz con Dios y con nuestros semejantes, pues se basa en el perdón. Perdonar es la clave para ser liberados de la amargura, del resentimiento, odio, soledad y depresión.
(2) 16 que ninguno sea inmoral. La Palabra de Dios cuando se refiere a la inmoralidad la enfoca en pecados sexuales, las define como pasiones vergonzosas: Fornicación, adulterio, lascivia. El disfrute pleno del placer sexual fue ordenado por Dios para el matrimonio, pero la sociedad liberal lo enfoca exclusivamente al placer hedonista, placer y satisfacción natural, lo que excluye el Plan de Dios sobre la sexualidad. (nada de amor)
Dios estableció dos géneros: “Varón y hembra los creó”. La sociedad liberal agregó tres nuevos géneros: Homosexual, transexual y bisexual.
El concepto liberal rechaza lo que Dios dice, eso es pecado, el pecado nos hace enemigos de Dios y sin Dios no hay paz ni santidad.
Por otra parte, la inmoralidad sexual causa efectos negativos en la salud física y mental. Los estados depresivos son frecuentes entre quienes llevan vidas sexuales desordenadas, son numerosos los casos de suicidios, asesinatos, violaciones y abusos. Violar los preceptos de Dios jamás trae paz ni santidad.
El consejo de Dios: “Huyan de la inmoralidad sexual”
(3) 16 que ninguno sea profano como Esaú que por una sola comida vendió su propia primogenitura. 17 Porque ya saben que fue reprobado, a pesar de que después quería heredar la bendición, porque no halló más ocasión de arrepentimiento, aunque lo buscó con lágrimas.
Esaú, el primer hijo de Isaac, a quien le correspondía ser bendecido por su Padre, actuó como profano, porque cambió la bendición por el placer de una comida. Rechazó la bendición para hacerse esclavo del placer. Las consecuencias de su conducta fueron las lágrimas, es decir, tristeza, dolor, angustia, desesperación: Depresión, en lugar de paz y santidad.
El consejo de Dios: Recibamos con alegría su bendición. "El Dios de paz, que por la sangre del pacto eterno levantó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, les haga aptos en todo lo bueno para hacer su voluntad, haciendo él en nosotros lo que es agradable delante de él por medio de Jesucristo. Amén." (Hebreos 13: 20-21)
CONCLUSIÓN
La depresión tiene su origen, como el de todos los males, en el pecado y el pecado se manifiesta al vivir conforme a nuestros deseos, desobedeciendo lo que Dios dice. No reconocer que somos pecadores y necesitamos el perdón, es rechazar la gracia y bendición de Dios Padre y la obra de su Hijo Cristo. Estar deprimidos y no reconocerlo es bloquear cualquier posibilidad de ser sanados, ni por Dios ni por los consejeros.
Dios promete restaurar, mediante el perdón en Cristo al pecador que arrepentido confiesa su pecado. El perdón de Dios nos capacita y anima a perdonar a quienes nos han ofendido y sacar de nuestra vida cualquier estorbo que atente contra la paz. Dios nos da su fortaleza, mediante la fe, para hacer frente a todas las adversidades que se presenten en nuestras vidas. Su Divina ayuda está disponible para darnos la victoria, por causa de Cristo, sobre la inmoralidad y todas las tentaciones. La paz y la santidad es la exclusiva obra de Dios, quien actúa por Su Palabra y los Sacramentos. Por el evangelio Dios proclama la paz y la santidad para todos por medio de Jesucristo. Cristo es nuestra paz y nos justifica por fe, por tanto no hay condenación para quienes están en Él. El precio de nuestra paz fue sobre Él, quien la alcanzó por la sangre derramada en la Cruz. Permitamos que Dios nos de la libertad de la depresión, recibiendo con gozo la salvación y con alegría su perdón. Amén.
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LA COMUNICACIÓN ENTRE PADRES E HIJOS


La comunicación es el intercambio de información entre dos o más personas. Esta puede ser verbal, por ejemplo cuando dos personas conversan, o puede ser no-verbal, como la expresión en la cara de una persona que probablemente le hará saber a otra que está enojada. La comunicación puede ser positiva, negativa, efectiva o
inefectiva.

Es importante que los padres se puedan comunicar abierta y efectivamente con sus hijos. Este tipo de comunicación beneficia no solo a los niños, sino también a cada miembro de la familia. Las relaciones entre padres e hijos se mejoran mucho cuando existe la comunicación efectiva. Por lo general, si la comunicación entre padres e hijos es buena, sus relaciones serán buenas también.
Los niños aprenden a comunicarse observando a los padres. Si los padres se comunican abierta y efectivamente, es posible que sus hijos lo hagan también. La habilidad de comunicarse beneficiará a los niños toda su vida. Los niños se empiezan a formar sus ideas y opiniones de si mismos basadas en lo bien que los padres se comunican con ellos. Cuando los padres se comunican efectivamente con sus hijos, les demuestran respeto. Los niños empiezan a sentir que sus padres los escuchan y los comprenden, lo cual les aumenta su amor propio. Por el contrario, si la comunicación entre padres e hijos es inefectiva o negativa, puede hacer que sus hijos piensen que no son importantes, que nadie los escucha y nadie los comprende. Estos niños pueden también pensar que sus padres no son de gran ayuda y no son de confianza.
Cuando los padres se comunican bien con sus hijos es más probable que sus niños estén dispuestos a hacer lo que se les pide. Estos niños saben lo que esperan de sus padres, y una vez que saben lo que se espera de ellos, es más probable que lo cumplan. Estos niños son mas aptos a sentirse mas seguros de su posición en la familia, y es posible que sean mas cooperativos.
 Maneras de Comunicarse Efectivamente Con Los Niños
*Empiece la comunicación efectiva cuando los niños están chicos. Antes de que los padres y los hijos puedan comunicarse, deben sentirse cómodos al hacerlo. Cuando los niños están chicos, los padres deben empezar a cimentar la comunicación abierta y efectiva. Esto puede lograrse cuando los padres están disponibles para contestar preguntas, o para platicar con sus hijos. Además, los padres que proveen a sus hijos con plenitud de amor, entendimiento y aceptación, ayudan a crear un buen ambiente para la comunicación franca. Los niños que se sienten amados y aceptados por sus padres son mas capaces de compartir sus sentimientos, pensamientos y preocupaciones con ellos.
A veces es más fácil para los padres sentir aceptación por sus hijos que demostrarla. Ellos deben hacerle saber a sus hijos que los aman y aceptan. Esto se puede lograr de manera verbal y no verbal. Los padres pueden hacer saber a sus hijos verbalmente que los aceptan por medio de lo que dicen. Ellos deben tratar de mandar mensajes positivos a sus hijos. Por ejemplo, cuando el niño recoge sus juguetes una vez que ha terminado con ellos, los padres pueden hacerle saber que lo aprecian diciendo algo como, "Me gusta cuando recoges tus juguetes sin que yo te lo pida." Cuando los padres platican con sus hijos, deben tener cuidado con lo que dicen y la manera que lo dicen. Todo lo que un padre le dice a su hijo envía un mensaje de la opinión que ellos tienen de sus hijos. Por ejemplo, si el padre dice algo como, "No me molestes. Estoy ocupado," sus hijos pensarán que sus necesidades no son importantes.
No verbalmente, los padres pueden demostrar su aceptación a sus hijos por medio de ademanes, expresiones faciales, y otras señales no verbales. Los padres deben eliminar los gritos, y prestarle mas atención a sus hijos. Esta conducta interfiere con la comunicación efectiva. La práctica hace al maestro: Los padres deben aprender a demostrar aceptación en formas que los niños entenderán.
*Comuníquese al nivel del niño. Cuando los padres se comunican con sus hijos, es importante que lo hagan al nivel del niño, verbal y físicamente. Verbalmente, los padres deben tratar de usar lenguaje apropiado a la edad de sus hijos para que puedan entender.
Con niños mas chicos, esto se puede lograr usando palabras simples. Por ejemplo, los niños pequeños entienden mejor si se les dice, "No golpees a tu hermana," en lugar de "No es aceptable que golpees a tu hermana." Los padres deben saber lo que sus hijos pueden entender y no deberían tratar de comunicarse en maneras que sus hijos no podrán entender. Físicamente, los padres no deben, por ejemplo, encumbrarse sobre sus hijos cuando se comunican con ellos. En cambio, deben tratar de ponerse al nivel del niño ya sea de rodillas, sentados o agachados. Esto facilitará el contacto con la mirada y los niños se sentirán menos intimidados por los padres cuando se miran cara a cara.
*Aprenda a realmente escuchar. Escuchar es una habilidad que se debe aprender y practicar. Escuchar es una parte muy importante de la comunicación efectiva. Cuando los padres escuchan a sus hijos les están mostrando que están interesados y que ponen atención a lo que sus hijos tienen que decir. A continuación se ofrecen unos consejos para convertirse en mejores escuchas:
>Haga y mantenga el contacto con la mirada. Los padres que hacen esto les demuestran a sus hijos que están interesados. Si no se hace contacto con la mirada, los niños pueden pensar que sus padres no están interesados en lo que dicen.
>Elimine las distracciones. Cuando los niños expresan el deseo de platicar, los padres deben brindarles su atención completa. Deben poner a un lado lo que están haciendo, mirar a sus hijos y ponerles atención. Si los padres por ejemplo, continúan leyendo al periódico, o mirando la televisión cuando sus hijos tratan de comunicarse, los niños pueden pensar que sus padres no están interesados en lo que tienen que decir o que no es importante. Si los niños desean comunicarse y los padres no pueden, los padres deben planear una hora después para platicar con ellos.
>Escuche con la boca cerrada. Los padres deben tratar de interrumpir lo menos que se pueda cuando sus hijos hablan. Pueden ofrecer apoyo por medio de una sonrisa o una caricia, sin interrumpir. Las interrupciones a menudo hacen que la persona que habla pierda su concentración, lo que es muy frustrante.
>Haga saber a sus hijos que han sido escuchados. Una vez que los niños han terminado de hablar, los padres pueden mostrarles que han prestado atención repitiendo lo que acaban de escuchar, con palabras diferentes, por ejemplo, "Parece que tuviste un día muy bueno en la guardería." Esto no solo les indica que sus padres han estado escuchando. También es una oportunidad de aclarar las cosas si los padres no entendieron algo o interpretan mal lo que sus niños tratan de decir.
*Mantenga las conversaciones breves. Entre mas chicos son los niños, mas difícil es que pongan atención a sermones largos. Una buena regla es que los padres hablen con sus hijos por 30 segundos, luego pregúnteles algo o pida su opinión de lo que se ha hablado. El objetivo es que los padres pasen información a sus hijos poco a poco y cerciorarse que los niños están atentos y comprenden lo que se les dice. Los padres deben permitirles a sus hijos que decidan cuando algo es demasiado. Deben buscar señales de que sus hijos han tenido suficiente. Estas incluyen la inquietud, falta de contacto visual, y distracción. Los padres deben saber cuando comunicarse con sus hijos, pero deben también saber cuando terminar.
*Haga preguntas indicadas. Algunas preguntas ayudan a mantener el curso de una conversación, mientras que otras la pueden parar en seco. Los padres deben tratar de hacer preguntas fáciles de contestar en sus conversaciones con sus hijos. Estas preguntas requieren a menudo respuestas detalladas que mantendrán la conversación interesante. Preguntas abiertas que comienzan con las palabras "qué", "cuando", "quién", o "como", son a menudo muy instigantes  para que los niños se sientan cómodos. Los padres deben evitar las preguntas que solo requieren respuestas de SI o NO. Aunque hacer preguntas indicadas ayuda en la conversación, los padres necesitan tener cuidado de no hacer muchas preguntas cuando conversan con sus hijos. Cuando esto sucede, las conversaciones se convierten en interrogatorios y los niños no se interesarán en participar.
*Exprese sus ideas y opiniones con sus hijos cuando se comunique con ellos. Para que la comunicación sea efectiva, debe haber dos lados. No solo los padres deben estar disponibles para sus hijos y listos a escucharlos, para que la comunicación efectiva tome lugar; también deben estar preparados para compartir ideas y sentimientos con sus hijos. Los padres pueden enseñar a sus hijos muchas cosas, por ejemplo, morales y valores, expresando sus ideas y opiniones. Cuando comparten sus ideas, sin embargo, deben tener cuidado de no hacer juicios. Parece lógico que entre más francos sean los padres con sus hijos, más francos serán los hijos con sus padres.

*Planeé regularmente juntas de familia o tiempo para platicar. Una forma muy útil para las familias de comunicarse efectivamente con niños mas crecidos es planear juntas para platicar. Esto se puede lograr de varias formas. En primer lugar, existe la junta familiar. Esta junta puede planearse una vez a la semana y/o cuando hay algo que la familia debe discutir. La familia puede utilizar estas juntas para discutir detalles cotidianos, como tareas, horas de volver a casa y horas de acostarse. Estas juntas familiares también son una buena oportunidad para discutir quejas y problemas. Este tiempo también se puede utilizar para hablar de cosas positivas que han ocurrido durante la semana. Lo importante es que cada miembro de la familia tenga tiempo para hablar y ser escuchado por los demás.
El horario regular para platicar y comunicarse no tiene que ser tan formal como la junta familiar. Por ejemplo, las familias pueden utilizar la hora de la cena para enterarse de lo que sucede con los demás. O los padres pueden hacer tiempo para tomar parte en juegos de comunicación, como escoger temas específicos de discusión y darle a cada uno en la familia la oportunidad de expresar su opinión. Lo que importa es que la familia aparte tiempo regularmente para comunicarse con uno y otro.
*Admita cuando usted no sabe algo. Cuando los niños hacen preguntas que los padres no pueden contestar, los padres pueden admitir que no saben la respuesta. Pueden también utilizar estas ocasiones como lecciones. Por ejemplo, los padres pueden enseñar a sus hijos a encontrar información en la biblioteca, en las enciclopedias, etc. Es mucho mejor que los padres demuestren a sus hijos que ellos son humanos y que no saben todo, que inventar alguna respuesta que puede ser falsa.
*Trate de dar explicaciones completas. Al contestar las preguntas de los niños, los padres deben proveer tanta información como sea necesaria, aunque los temas sean de algo que los padres no se sienten cómodos para hablar. Esto no significa que los padres tienen que describir detalle por detalle. Solo que es importante es que los padres sepan cuanta información necesitan sus niños y proveérsela. Los padres deben asegurarse de que esta información sea apropiada a la edad de lo niños. También deben alentar a los niños a que hagan preguntas. Esto ayudará a los padres a enterarse del tipo de información que buscan los niños. No dar información suficiente puede tener como consecuencia que los niños se formen criterios que no son necesariamente verdaderos.

Comunicación Durante Conflictos
Todas las familias tendrán conflictos una que otra vez. Aunque los conflictos pueden ser desconcertantes, no tienen que distraer mucho. Hay varias cosas que los padres pueden hacer para aminorar los conflictos y al mismo tiempo mantener abiertas las líneas de comunicación. A continuación se ofrecen algunas sugerencias.
*Resuelva un problema a la vez. Durante los conflictos, es mejor tratar de resolver un problema a la vez. No es buena idea discutir varios temas al mismo tiempo. Esto puede ser confuso para padres e hijos. Cuando esto sucede las familias pierden rápido la mira de los temas importantes.
*Busque maneras creativas de resolver los problemas. Cuando se trata de resolver conflictos, los padres deben tener en cuenta que existe mas de una solución para cada problema. Padres e hijos deben trabajar juntos para encontrar soluciones que sean satisfactorias para ambos. La flexibilidad para resolver problemas es una habilidad muy buena que los niños pueden aprender. Si una solución no funciona, los padres deben tratar de ser suficientemente flexibles para encontrar otra.
*Sea cortés. Los padres no deben olvidar las reglas comunes de cortesía solo porque se trata de sus hijos. Durante los conflictos, o quizás en otras ocasiones, los padres deben tratar a sus hijos con el mismo respeto con que tratarían a cualquier otra persona. Los niños son personas también, y por lo tanto merecen ser tratados con respeto. A veces durante el calor de la discusión o el desacuerdo, los padres les dicen cosas a sus hijos que nunca dirían a otro pariente o amistad cercana. Los padres deben hacer el esfuerzo de no hacer esto.
*Utilice mensajes de "YO". Cuando se discuten los conflictos con sus hijos, los padres deben siempre tratar de referirse a los problemas conforme a su opinión. Por ejemplo, en lugar de decir "Tú nunca recoges la ropa como se supone," los padres pueden decir "Yo me siento frustrado cuando tu no recoges tu ropa." Al usar "Yo", los padres les expresan a sus hijos como los hace sentir su conducta, en lugar de acusarlos o humillarlos. Hablando de "YO" es efectivo con los niños porque ellos no tienden a rebelarse contra algo que se les dice con respecto a la manera de sentir de los padres. Cuando se les dice algo con respecto a los sentimientos del padre, los niños se sienten menos amenazados que si se les habla con acusaciones y/o culpa. Hablando de "YO" también enseña a sus hijos a ser responsables por sus actos. Los padres que expresan sus sentimientos de tal manera enseñan a sus hijos a comportarse así también.
*Esté dispuesto a perdonar. Enseñe a sus hijos a perdonar, haciéndolo usted mismo.
Como Evitar La Comunicación Negativa
Desafortunadamente, muchos padres no están conscientes de cuantas veces utilizan formas negativas para comunicarse con sus hijos. Esto padres pueden, como resultado, estar plantando la semillas de la desconfianza y el bajo nivel de amor propio de sus hijos. Es por esto que es importante que los padres se enteren y corrijan cualquier forma de comunicación negativa que usan con sus hijos. A continuación se ofrece una lista de ejemplos de mala comunicación. Los padres deben revisar esta lista e identificar las tendencias que son familiares. Después de identificar las áreas problemáticas, los padres pueden empezar a hacer cambios. Recuerde que esta lista no contiene todos los ejemplos de comunicación negativa. Hay quizás muchas formas de comunicación que se consideran negativas que no están incluidas en esta lista.
 Ejemplos De Comunicación Negativa Que Los Padres Deben Evitar
*Fastidios y sermones. Fastidiar es repetir algo que ya se ha dicho. Sermonear es dar más información de la que es necesaria sin dar cabida a otras opiniones o ideas. Los padres pueden evitar fastidios y sermones manteniendo breves las conversaciones con sus hijos. También deben tener en cuenta que una vez que les han dicho algo a sus hijos, no es necesario decirlo de nuevo. En lugar de fastidiarlos, los padres pueden usar otra consecuencia, como un tiempo de descanso, cuando sus hijos no hacen algo que se les ha pedido. Fastidiar y sermonear hacen que los niños dejen de escuchar o se pongan a la defensiva o se sientan resentidos.
*Interrupciones. Cuando los niños estén hablando, los padres deben darles la oportunidad de terminar lo que están diciendo antes de que ellos hablen. Es una regla de cortesía. Los niños que sienten que no son escuchados, pueden dejar de tratar de comunicarse con sus padres por completo.
*Críticas. Los padres no deben de criticar los sentimientos, las opiniones o ideas de sus hijos. A menudo los niños miran esto como un ataque, lo que resulta en poco amor propio. Cuando sea necesario, los padres deben criticar cierta conducta, o lo que sus niños han hecho, pero no critique al niño mismo.
*Viviendo en el pasado. Una vez que el problema o conflicto se ha resuelto, los padres deben tratar de no mencionarlo otra vez. A los niños se les debe permitir volver a empezar. Los padres que mencionan constantemente los errores que sus hijos han cometido en el pasado, están enseñando a sus hijos a guardar rencores por mucho tiempo. Además, los niños deben saber que una vez que un problema ha sido resuelto, permanecerá resuelto.
*Tratar de controlar a sus hijos usando sentimientos de culpabilidad. Esto incluye intentar que los niños se sientan culpables por sus opiniones, sentimientos y/o acciones. Los padres que usan la culpabilidad para
controlar a sus hijos pueden hacer un gran daño a su relación con ellos.
*Usar sarcasmo. Los padres están usando sarcasmo cuando dicen algo que no quieren decir, o insinúan lo opuesto a lo que dicen por el tono de su voz. Un ejemplo sería un padre diciendo "Oh, qué gracioso eres," cuando un niño rompe algo. El sarcasmo hiere a los niños y nunca sirve cuando los padres tratan de comunicarse efectivamente con sus hijos.
*Decirle a sus hijos como resolver sus problemas. Esto sucede cuando los padres intervienen y les dicen a sus hijos como hacer las cosas, en lugar de dejarlos que busquen soluciones a sus problemas. Los padres que le dicen a sus hijos como resolver sus problemas, pueden hacer creer al niño que el no tiene ningún control sobre su propia vida. Estos niños pueden acabar creyendo que sus padres no les tienen confianza. O, pueden ofenderse cuando se les dice lo que deben hacer y como resultado se rebelan contra los consejos de sus padres.
*Hacer a los niños sentirse menos. Las humillaciones toman diferentes formas, como nombres ofensivos, ridiculizar, hacer juicio, culpabilidad, etc. Las humillaciones perjudican la buena comunicación, también dañan el amor propio de los niños. Los niños que son humillados por sus padres a menudo se sienten rechazados, no amados, e incapaces.
*Amenazar. Las amenazas rara vez son efectivas. A menudo hacen que los niños se sientan sin poder y se resienten con sus padres.
*Mentir. No importa que tan grande sea la tentación de inventar una mentira para evitar, por ejemplo, hablar del sexo, los padres nunca deben mentir. Deberían tratar de ser francos y honestos con sus hijos. Esto hará que sus hijos también sean francos y honestos con sus padres. Además, los niños son muy perspicaces. Son muy buenos para presentir si sus padres son totalmente honestos con ellos. Esto puede causar desconfianza.
*Negarles sus sentimientos a los niños. Cuando los niños les dicen a sus padres como se sienten, los padres no deben de tomarlo a la ligera. Si por ejemplo, el padre piensa que el niño no debería estar triste por haber perdido un juego de basquetbol, no debería decir nada. Puede en cambio decir algo que ayude, por ejemplo, "Yo se que tu querías realmente ganar. A veces es difícil perder." Con niños mas pequeños, esto se puede lograr con palabras mas sencillas y directas. Los niños necesitan que sus padres apoyen sus sentimientos. Los padres necesitan demostrar apoyo a sus hijos cuando se trata de sus sentimientos. Si no, sus hijos se sentirán mal entendidos por sus padres.



Forjando la Buena Comunicación
Aquí hay algunos ejemplos de cosas que los padres pueden decirle a sus hijos para ayudar a abrir las líneas de comunicación.
"Me gustaría saber mas del asunto."
"Dime más acerca de esto."
"Habla. Yo escucho."
"Yo entiendo."
"Qué piensas tú de…."
"¿De qué te gustaría hablar?"
¿Hay algo más de lo que quieres hablar?
"Eso suena interesante."
"Me interesa."
"Explícamelo por favor."
La comunicación franca y efectiva toma mucho trabajo y práctica. Los padres deben recordar que no son perfectos. Ellos cometen errores. Lo que importa es que los padres se esfuercen a comunicarse efectivamente con sus hijos, desde que estos son pequeños. El resultado será una relación mas cercana y positiva entre los padres y sus hijos.