sábado, 19 de mayo de 2012

COMO ESTABLECER UN SISTEMA DE PUNTOS

¿Porqué Usar un Sistema de Puntos?




·       Para fortalecer la conducta social y también disminuir la mala conducta.
·       Para poner énfasis en lo que los niños hacen bien.
·       Para ayudar a los niños a que aprendan que su comportamiento hace la diferencia.
·       Para dar estructura a las rutinas diarias de los niños.
·       Para establecer ocasiones en que se pueda sorprender a los niños portándose bien.
En la mayoría de los casos, el sistema de puntos es apropiado para los niños de 8 años o más.
 Pasos Para Utilizar el Sistema de Puntos

1.    Los padres deben indicar lo que quieren que sus hijos hagan. Deben entonces consultar con ellos. Finalmente, deben hacer una lista de las conductas deseables, y expresar cuándo quieren los padres que estas ocurran.

2.  Los padres deben examinar si son razonables sus expectativas.

3.  Los padres deben indicar ciertas conductas negativas. Luego deben consultar con sus hijos y hacer una lista de conductas inapropiadas. Después, los padres deben explicar cuánto quieren que disminuya la mala conducta.

4.   Los padres deben hacer una lista de algunas cosas favoritas de los niños, eventos, o actividades. Luego deben darle cierto valor a las cosas que pueden controlar. Deben entonces seleccionar ciertos eventos o cosas que pueden dar a sus hijos como premio diario y sin mucho esfuerzo.

5.  Los padres deben definir con detalle las conductas aceptables e inaceptables. Los padres deben anotar estas definiciones en una hoja de registro y mantenerlas como referencia.

6.   Los padres deben indicar las conductas aceptables e inaceptables y los privilegios para sus niños en un registro semanal.

7.  Los padres deben tomar decisiones sobre los puntos otorgados por el buen comportamiento. El valor más alto debe darse a la conducta que ambos padres e hijos consideran más importantes y que ocurren menos. Es buena idea designar valores altos a conductas apropiadas para poner las cosas a favor del niño.

8.   Luego, los padres deben asignar valores a la conducta inaceptable. Estos puntos se pueden substraer cada que los niños se portan mal. El valor quitado por mala conducta debe ser menor que el valor agregado por buena conducta. Los valores bajos deben asignarse a la mala conducta. Los padres deben asignar valores más altos a cosas que puedan hacer más daño al niño y/o a otros, como la agresión. Los padres deben asignar valores más bajos a comportamiento negativo que no tiene mayores consecuencias, como las “palabrotas” o interrupciones. Los padres deben asignar valores bajos a conductas que ocurren con frecuencia para disminuir la posibilidad de que el niño no pierda más puntos de los que gana cada día.

9.   Los padres deben asignar puntos a las actividades favoritas de los niños, para que de esa forma ellos puedan diario intercambiar puntos por uno o más privilegios. Por ejemplo, un privilegio no debería costar siete puntos cuando se ganan puntos de cinco en cinco por buena conducta. Si los padres tienen dudas, deberían asignar puntos más bajos por los privilegios.

10.        Los padres deben permitir que sus hijos intercambien diariamente los puntos que han ganado.

11. Durante el recuento, los cuales deberían planearse por adelantado, los padres deberían describir el comportamiento del niño, entregar las recompensas y determinar la hora para los intercambios. Los padres no deben discutir estos temas a cualquier otra hora. Esto disminuirá la posibilidad de que los niños ganen puntos manipulando las cosas.

12.        Los padres no deben permitir que los niños guarden puntos ganados para otro día.

13.       Los padres deberían planear oportunidades para que los niños ganen premios si el número de puntos ganados indica que se han estado comportando mejor de lo que se esperaba. Después, cuando los niños se portan consistentemente mejor de lo que los padres esperaban, los padres pueden aumentar la frecuencia necesaria para el buen comportamiento para que los niños puedan ganar puntos (o disminuir la frecuencia de la conducta negativa necesaria para ganar puntos), o espaciar las oportunidades para ganar premios (ej.: semanal o mensualmente).

14.        Los padres deben revisar con frecuencia el comportamiento de los niños. Cuando el nivel del buen comportamiento es más alto de lo que se esperaba, los padres pueden disminuir gradualmente el valor de tal comportamiento y/o pueden empezar a felicitar al niño un poco menos, por ejemplo, cada dos que se porta bien. Poco a poco, los padres deben sustituir una conducta nueva por una que ocurre frecuentemente. Cuando los niños se portan mal con más frecuencia de la que se esperaba, los padres pueden mantener las mismas condiciones para esa conducta y establecer condiciones para otra conducta inaceptable.

15.        Los padres deben revisar a menudo la frecuencia con la que los niños intercambian puntos ganados por ciertos privilegios. Si los niños rara vez escogen cierto privilegio, los padres pueden hablar con ellos al respecto y reemplazarlo con otro privilegio.

16.       Si el comportamiento de los niños está bajo el nivel que los padres esperaban, se deberían revisar los siguientes puntos.
·       La consistencia y precisión con la que los padres observan a sus niños.
·       El control que los padres tienen sobre el acceso a los privilegios.
·       La tendencia en el comportamiento de sus hijos.
·       La frecuencia y condiciones para intercambiar puntos por privilegios.
·       La manera en que los privilegios han sido seleccionados por padres e hijos.

 Como Dar y Quitar Puntos
Dar y quitar puntos debería ser tan placentero como sea posible. Hay ciertas cosas que padres e hijos deben considerar cuando se intercambian puntos.
 Reglas Para Los Padres Cuando Dan Puntos
·       Los padres deben estar cerca de los niños y poder tocarlos (no 10 metros  retirados o en otro cuarto).
·       Los padres deben mirar a sus hijos y sonreír.
·       Los padres deben hablar con una voz agradable.
·       Los padres deben asegurarse de que sus niños estén de frente y con la mirada hacia ellos.
·       Los padres deben elogiar a sus hijos. Pueden decirles algo como "¡Oh, qué bien!. Has hecho un buen trabajo. ¡Esto me ayuda mucho!" Los padres deben entonces recompensar a sus hijos con puntos. Pueden decir algo como "Porqué no te apuntas veinte puntos por portarte tan bien."
·       Los padres deben describir el buen comportamiento a sus hijos para que ellos sepan exactamente la razón (por cuál conducta) por la que se ganaron el premio.
·       Los padres deben ocasionalmente dar a sus hijos una palmada en la espalda o acariciar su cabello – ¡A los niños les encanta!
·       Los padres deben asegurarse de que sus hijos les respondan. Los niños pueden decir algo como "Gracias mamá", o "Muy bien".
 Reglas Para Los Padres Cuando Quitan Puntos
·       Los padres deben estar cerca de sus hijos para poder tocarlos.
·       Los padres deben mirar a sus hijos y sonreír.
·       Los padres deben hablar con voz agradable. Los niños no deberían ser capaces de notar si los padres les van a dar o a quitar puntos, por medio del tono de voz o la expresión de su cara.
·       Los padres deben asegurarse de que sus hijos estén de frente y con la mirada hacia ellos.
·       Los padres deben explicar con voz calmada cuál conducta fue inapropiada.
·       Los padres deben luego cobrar los puntos malos.
·       Los padres deben asegurarse de que sus niños acepten el castigo de forma apropiada. (Escuche las "Reglas Para Los Niños" a continuación.
·       Señalando la respuesta apropiada puede ser necesario algunas veces, por ejemplo, "Vamos, mírame a los ojos. Así está mejor."
·       Si los niños aceptan la pérdida de puntos de buen modo, es bueno que los padres devuelvan parte de los puntos.
·       Si los niños están muy disgustados o molestos cuando los padres les quitan los puntos, los padres no deberían forzar el tema. En cambio, pueden darle al niño un tiempo de descanso (para que se calmen) y quitarles los puntos.
 Reglas Para Los Niños Cuando Ganan Puntos
·       Los niños deben estar frente a los padres. Deben mirarlos y sonreír.
·       Los niños deben responder cuando se les otorga los puntos diciendo "Muy bien,", "Gracias," o algo agradable.
·       Los niños deben anotar sus puntos buenos en un papel en menos de cinco minutos. Si no lo hacen en ese tiempo, los puntos no cuentan. Si están ocupados, es aceptable que les pidan a sus padres que anoten los puntos por ellos.
·       Los niños deben traer en menos de cinco minutos, su hoja de registro a uno de los padres para que la firme.
·       Una vez que los padres han firmado la hoja de registro, los niños deben responder a esto diciendo "Gracias," y deben luego llevar la hoja al lugar donde la guardan.

Reglas Para Los Niños Cuando Pierden Puntos
·       Los niños deben estar frente a sus padres. Deben mirarlos y sonreír. No deben hacer gestos.
·       Los niños deben responder a la pérdida de puntos diciendo algo como "Muy bien," o "Traeré mi hoja de registro." Los niños deben continuar mirando a los padres y deben comportarse de forma placentera.
·       Los niños deben anotar los puntos perdidos en su hoja de registro. Si se olvidan, deben perder el doble de puntos después de cinco minutos.
·       Los niños deben luego pedirle a uno de los padres que les firme la hoja. Deberían seguir comportándose de forma agradable.
·       Después de que los padres han firmado la hoja de registro, los niños deben responder a esto diciendo "Gracias," o algo parecido. Deben luego llevar la hoja a donde la guardan.

¿Hay que premiar las buenas acciones de los niños?
Cuando educamos a nuestro hijo a veces no sabemos si es bueno o no premiarle cuando hace las cosas bien. Algunas personas piensan que hacer esto es acostumbrarles a recibir recompensas por comportamientos naturales, pero elogiarles por su buen comportamiento no es malo.
Sin embargo, hay que insistir en que el premio es el mejor (no el único) recurso educativo. Pero no nos estamos refiriendo a premios materiales sino a elogiar las buenas acciones del pequeño.

Elogio, el mejor premio

Un premio muy eficaz si queremos lograr y mantener buenos comportamientos es el elogio, que para dar buenos resultados debe cumplir algunas condiciones:
  • Ha de ser sincero y espontáneo, no artificioso ni utilizado para manipular y chantajear al niño.
  • También tiene que ser de una intensidad acorde con el logro o buen comportamiento que elogiamos.
  • Debe estar bien dosificado: ni muchos ni pocos.
  • Ha de describir claramente el comportamiento que se elogia: «Te has portado muy bien haciendo tus deberes», en lugar de únicamente: «Te has portado muy bien».
  • Los premios no solo son elogios, también están las caricias, las sonrisas, el compartir tiempo...
  • En cuanto a los premios materiales, a veces son oportunos, pero no estamos hablando de dinero o de regalos, también pueden ser: «Lo has hecho tan bien que te prepararé tu merienda preferida», o «como cada día lo haces mejor, hoy te invito al cine».

Consejo sobre los premios

  • Deben ser una manifestación de afecto (y no sustituirlo).
  • Siempre que no se conviertan en una obligación, son un buen modo de expresar nuestro agradecimiento y de hacer que el niño se sienta orgulloso.
  • Habituarse a obedecer a base de premios puede hacerle un chantajista, pero usarlos de vez en cuando es una muestra de afecto que no tiene por qué crear hábito ni malinterpretarse.




sábado, 12 de mayo de 2012

El Comportamiento de los niños Durante la Comida









La hora de la comida debe ser algo agradable para la familia. También puede ser una oportunidad para aprender. Los padres deberían utilizar este tiempo para enseñar a los niños como comportarse cuando tienen visitas, cuando comen fuera de la casa, o cuando  se sientan a la mesa durante la comida familiar. Los padres deberían esperar que sus hijos se comporten de manera similar durante todas las comidas. El comportamiento apropiado durante la comida es una habilidad que se aprende. Los padres no deberían esperanzarse a que sus hijos sepan como comportarse sin ser enseñados. Una buena forma de enseñar a los niños a comportarse durante la comida es poniendo un buen ejemplo. Recuerde que los niños a menudo imitan a sus padres en muchas situaciones. Los padres deben establecer cierto número de reglas para la hora de la comida. Por Ejemplo:

1. Los niños deben permanecer sentados en sus sillas altas  (si son pequeños), o en una silla al lado de la mesa (si están mas crecidos), durante la comida.

2. Arrojar comida no es aceptable.

3. Los niños deber mantener la boca cerrada cuando mastican.
Los padres deberían recordarles a sus hijos acerca de las reglas de cada comida hasta que los niños las cumplan consistentemente.  También deberían revisar estas reglas ocasionalmente. Los padres deberían aclarar lo que pasará si la mala conducta ocurre (por ejemplo: “Si tiras la comida, entonces...”).
Los padres deberían hacer que las comidas sean una hora placentera para los niños. Las cosas desagradables que han sucedido durante el día no se deberían discutir. Los padres deberían enfocarse en los intercambios positivos. También deben incluir a los niños en las conversaciones. Los padres pueden, por ejemplo, discutir lo que los niños han hecho durante el día. Los padres deberían elogiar el comportamiento adecuado (cuando los niños permanecen sentados quietamente) durante la comida. Los padres deberían siempre prestarle atención al buen comportamiento y los buenos hábitos para comer durante la comida tan seguido como sea necesario.  Los padres deberían servirles a sus niños cantidades pequeñas de comida, las cuales estarán seguros de que se las comerán. Los padres pueden servirles más comida si los niños la desean. También deberían servir una variedad de alimentos. 
Los padres deberían determinar un tiempo razonable para las comidas. Por ejemplo, treinta minutos para comidas; quince minutos para meriendas. Los padres pueden utilizar un tomador de tiempo portátil en la cocina para indicar cuando la hora de comer se ha terminado, si esto se convierte en un problema. Cuando suena la campana, la comida se debe retirar de la mesa sin importar que los niños hayan terminado. Los padres no deberían decirles nada a sus hijos si no terminan de comer a tiempo. Una vez que las comidas terminan a tiempo por una o dos semanas, los padres pueden dejar de utilizar el tomador de tiempo. 

Problemas de Comportamiento:

Algunos Recordatorios

*Ignore las rabietas.  Los padres no deberían poner atención a sus hijos si se empiezan a quejar o a llorar, o a dar rabietas. 
*No permita que se arroje la comida. Si un niño comienza a arrojar comida, los padres deberían de recoger su plato inmediatamente. NO PLATIQUE CON EL O ELLA. Después de dos minutos, (si él o ella están quietos) los padres pueden volver con el  plato  y  decirle  al  niño  que  es  hora  de comer. 
*Utilice tiempo de descanso.  Si alguna otra regla ha sido desobedecida, los padres deberían de alejar  al niño o niña que desobedeció y le pueden dar un tiempo de descanso. Si se acumulan tres tiempos de descanso durante la comida, los padres deberían de terminar la hora de comer para el niño o niña. Si los padres tienen que terminar la comida, lo deberían de hacer de manera calmada. No deberían regañar o fastidiar. No debería de haber meriendas hasta la próxima comida (solo agua).

*La manera apropiada de sentarse.

Los niños deber comer su comida sentados en una silla alta, un sillón o una silla regular, dependiendo de la edad del niño e incluyendo meriendas. Los padres no deben permitir juguetes durante la comida. Estos juguetes se pueden dejar donde el niño los pueda ver.

*Evite distracciones.  Los padres deben apagar la televisión y/o el radio hasta que la comida termine. Esto minimizará las distracciones.

*Evite los alimentos de biberón.  Los padres deberían evitar que los niños tomen biberón si están pequeños. Todos los líquidos deben tomarse en una taza pequeña. Los biberones pueden ser usados a determinada hora. Si los niños empiezan a tomar en taza, esto debe ser apoyado o introducido a su debido tiempo. Si los niños necesitan la botella para poder irse a dormir, los padres deben buscar otra manera de calmarlos (por ejemplo música, un juguete, una manta,  o un juguete móvil.

*Evite las comidas antes o después de la hora de comer.   Los padres no deberían permitir que sus hijos tengan acceso a la comida antes de tiempo, o les arruinará el apetito. Todos los alimentos que los niños comen debería ser lo mas nutritivo posible.  Los padres deberían apoyar a sus hijos a comer bocadillos y meriendas como la fruta, fruta deshidratada, jugo de fruta, queso, galletas, sándwiches de crema de cacahuate, etc. Los padres deberían de tener cuidado comidas que pudieran ahogar a los niños, tal como palomitas de maíz y pasas. Estas comidas no deberían de dárseles a los niños pequeños hasta que crezcan un poco.

Deben tener buenos hábitos

Está claro que no podemos exigir a nuestros pequeños el mismo comportamiento en casa que en un restaurante u otro establecimiento público. Para no tener que sufrir cuando comemos fuera (no en un restaurante de comida rápida) o asistimos a banquetes y otros actos sociales, tenemos que ocuparnos de los buenos modales diariamente, en casa, y aprovechar todas las ocasiones que se nos presenten para enseñarles el buen comportamiento social.
He aquí algunas pautas de conducta que pueden seguir los niños sin causarles ningún trauma y sin dejar de ser niños. Se pueden introducir paulatinamente estos hábitos y pueden ser comportamientos habituales a partir de los seis años.
-Sentarse donde se les indique, correctamente, no con las piernas cruzadas encima de la silla, o arrodillados. Si quedan demasiado bajos respecto a la mesa, pediremos la ayuda del camarero. La mayoría de establecimientos tienen cojines especiales, incluso sillas adecuadas para ellos.

-Lavarse las manos antes de sentarse. Si es necesario, asearse un poco, especialmente la cara. Aunque sean niños, es desagradable compartir la mesa con personas desaliñadas, mocosas o sudorosas.
 -No empiezan a comer hasta que todo el mundo esté sentado y se les indique que ya pueden empezar. Además, tendrán que reprimir las ganas de "picar" de las bandejas o platos ya servidos.
-Antes de empezar a tomar los alimentos, se colocarán la servilleta extendida sobre las rodillas. Si son muy pequeños, pueden utilizarlas en forma de babero. Las manos tienen que permanecer siempre encima de la mesa.
-Limpiarse la boca antes de beber. Si se sirven ellos mismos la bebida, indicarles que sean cuidadosos. El vaso se llena hasta la mitad y, así, evitamos algunas de las habituales inundaciones a que nos tienen acostumbrados.

-Jugar con los alimentos, lanzar bolitas de pan, hacer ruidos al beber, etc. no es admisible. Es comprensible una cierta torpeza en sus movimientos, pero la norma elemental de "en la mesa no se juega" tiene que ser respetada.

-No tocar la comida o los cubiertos de los demás y no jugar con los cubiertos, pues los accidentes llegan sin avisar. Si los niños no son muy mayores y están solos en una mesa separada o en un extremo de la de los padres, hay que valorar la necesidad de servir la comida cortada, evitando posibles accidentes con los cuchillos.

-A pesar de que no es obligatorio que manejen los cubiertos igual que los adultos, hay que mentalizarles de que la comida, salvo casos muy concretos, no se toca con los dedos.
-Si no les gusta lo que les sirven, previo permiso de los padres, pueden rechazar los alimentos con educación. Esto es preferible a que jueguen con ellos en el plato.

-Aunque esta norma protocolaria no suele coincidir con las indicaciones pediátricas, deberían terminar los alimentos que se les han servido. La solución es pactar razonablemente con el niño, antes de servir, la cantidad que va a comer.
 -Si necesitan algo deben pedirlo educadamente, tanto a sus compañeros de mesa como a los camareros
. Siempre "por favor" y "gracias".
-No se levantarán de la mesa hasta que hayan terminado, incluso hasta que todo el mundo haya terminado. Algunos padres permiten que sus hijos correteen por las salas del restaurante molestando a las demás personas, actitud que no dice mucho a favor de la atención que dedican a sus hijos.
-Aunque resulta francamente difícil conseguir que no griten, es nuestra obligación insistir en que moderen su tono de voz. De otra forma, convertiremos la comida en una tortura para los oídos.
-Para los adultos resulta obvio que no se canta ni se discute a lo largo de la comida, pero no lo es para estos pequeños aprendices, por lo que nos mantendremos alerta ante posibles muestras de su espontaneidad. 

-El trato a las personas encargadas de servir la mesa tiene que ser correcto. A partir de cierta edad, los niños aprenden que tienen que dirigirse a los adultos de "usted": este es el primer paso para un trato cortés y respetuoso con los demás.
En general, se trata de "entrenar" a nuestros niños para que adquieran los hábitos básicos de pulcritud y educación lo más pronto posible. La inteligencia y la intuición de estos "tesoros" les indicaran como tienen que comportarse en cada situación. Pero para que esto sea posible, debemos dotarles de los conocimientos suficientes y hacerles sentir que merece la pena, en determinadas ocasiones, realizar el esfuerzo de contener su desbordada energía.




viernes, 11 de mayo de 2012

Como Apoyar el Aprendizaje de su Hijo en su Hogar


Los maestros nos dicen que hay factores que afectan la habilidad de aprender de un niño diariamente. Cuando estos factores no están en balance, es improbable que el niño aprenda mucho. Por otra parte, si los factores son alimentados pueden aumentar el aprendizaje.

Tres factores fundamentales que afectan la experiencia educacional, son el bienestar emocional, la buena nutrición,  y el descanso apropiado. Los padres juegan un papel importante cuando se aseguran que sus hijos vayan a la escuela en una condición propicia al aprendizaje.

BIENESTAR EMOCIONAL

Estudios recientes sugieren que los niños pueden tener dificultad organizando información académica si están preocupados o ansiosos. Un prominente psiquiatra y neurocientífico han hecho esta observación:
…La mayoría de la gente no comprende la importancia de los pensamientos y dejan el desarrollo del pensamiento a la probabilidad. ¿Sabía usted que cada pensamiento que tiene manda señales eléctricos al cerebro? Los pensamientos tienen propiedades actuales. ¡Son reales! Tienen influencia sobre cada célula de su cuerpo. Cuando su mente está llena de pensamientos negativos, afecta a su sistema límbico profundo y causan problemas en el sistema. Aprendiendo a controlar y redirigir esos pensamientos en una manera positiva y útil para poder sentirse mejor.

Un educador, bien conocido por sus estudios relacionados con la neurología y educación, ha notado que “los estudios sugieren que la tensión estrangula su habilidad de hacer decisiones, juicios y perjudica su memoria y aprendizaje.”
Los maestros generalmente son bien entrenados en maneras de tratar la tensión  y la ansiedad relacionada con la clase. Sin embargo, muchas veces están en aprietos cuando deben de tratar con problemas que provienen del hogar. Por esa razón, es importante que los padres comprendan la manera en la cual las emociones son afectadas por la casa.
El psicólogo Daniel Goleman de Universidad de Harvard, sugiere que hay cinco áreas emocionales que son imperativas para el éxito escolar: consciente de sí mismo, métodos directivos, motivación, simpatía, y aptitudes sociales.

Siendo Consciente de sí Mismo: Las emociones que no son tratadas apropiadamente pueden sobre tomar al cerebro y hacer que la información sea procesada inadecuadamente.  Ser consciente de sí mismo es tener la habilidad de reconocer lo que siente mientras lo está sintiendo. La inhabilidad de entender sus propias emociones y sus sentimientos acerca de esa emoción, por ejemplo su propio enojo, frustración, etc. puede conducirlo a expresar sus emociones inapropiadamente. Un niño debe entender que el enojo es algunas veces inapropiado y que la frustración es normal y que todos  nos sentimos frustrados algunas veces.  Se aconseja a los padres  que hagan un esfuerzo, desde que sus hijos son pequeños, de ayudarles a entender que sentir emociones negativas es normal. Reflexione acerca de sus propias emociones y ayude a que su hijo vea que usted también ha tenido ese sentimiento, pero que lo ha sobrepasado en una manera positiva. Los niños deben aprender que no deben sobre reaccionar en situaciones incomodas, tampoco deben de esperar que otros se hagan cargo de sus problemas. Además, enseñarle a los niños a entender y tratar sus problemas disminuirá la probabilidad de que se pongan deprimidos y demasiado ansiosos, esto puede dar paso a otras conductas negativas desde la personalidad explosiva a la anorexia / bulimia.

Dirigiendo su Temperamento: Dirigir el temperamento es importante para poder ser exitoso en la escuela. Los niños son dominados por su impulso, y su humor puede afectar el impulso. Considere esto, si su jefe lo pone de mal humor, la peor cosa que puede hacer es actuar de manera enojada e impulsiva; por ejemplo, decirle que se va a resignar si no le gusta la forma en la que usted hace las cosas,  o quizás decir maldiciones, o pegarle. Algunas veces, los estudiantes hacen cosas similares porque no tienen la experiencia para reconocer que es conducta negativa. Los padres pueden ayudarles a sus hijos a escapar esta situación desagradable, para ellos y otras personas, enseñándoles como mantener sus emociones bajo control.

Un buen plan para enseñarle a sus hijos como manejar su impulso es con el problema Alto y Piensa. Aquí hay una variación que puede ser usada fácilmente.  Enséñele a su hijo como usarlo antes de reaccionar. Dígale: “dite a ti mismo/a”:

¡ALTO!

¡PIENSA!


¿ES BUENA IDEA?               ¿ES MALA IDEA?
¡Si es una buena idea, soy un ganador!


Si es una mala idea, entonces NECESITO BUSCAR UNA MEJOR DECISION, porque

Una mala decisión no me traerá lo quiero en realidad
Una buena decisión pondrá a TODOS DE BUEN HUMOR, incluyéndome a MÍ.


Usted puede hacer su propio Cartelón de Alto y Piensa, y lo puede colocar en varios lugares alrededor de su casa. Esto ayudara a que su hijo aprenda el proceso.

Hacer que un niño tenga la habilidad de solucionar problemas es buen apoyo para el aprendizaje.

Motivación: La motivación es esencial para poder ser exitoso en la escuela. A muchos niños les falta la motivación porque están desanimados. Cuando ven obstáculos y contratiempos, piensan que no pueden hacer nada para sobrepasarlos.  Si hay alguien que les ayude a encontrar maneras de sobrepasar obstáculos,  es más probable que los niños tengan la motivación para avanzar. Pequeñas cantidades de éxito diariamente resultaran engendrando la idea de que, “no soy tonto." Puedo aprender y ser exitoso.” Ayude a que su hijo encuentre algún éxito, no importa que insignificante piense usted que sea. Un pequeño éxito será mucho más grande para un niño que está decepcionado. Trabaje con el maestro de su hijo para aprender las necesidades del niño, comience la carrera al éxito con pasos pequeños.

El entrenador del equipo de fútbol Americano de la Universidad de Kansas, Bill Snyder, es un experto en desarrollar el éxito. El tomó un equipo que tenía el peor record en el fútbol colegial y los convirtió en un equipo de nivel nacional. En el año 1998 fueron uno de los mejores equipos de la nación. El entrenador Snyder reconoció que había tomado el cargo de un equipo que solamente esperaba perder.

“Durante el primer año, entré al vestidor cada día después de la práctica, y hablé con cada uno de los muchachos.  Le preguntaba la misma pregunta a cada uno, “¿mejoraste hoy?” Después de algún tiempo la respuesta se convirtió en “si” porque no me querían contestar que “no.” Después les comencé a pedir que me digieran el área que mejoraron. Esa pregunta les ayudo a comprender el concepto de tener que trabajar continuamente hacia el mejoramiento…

… Durante la práctica de casi tres horas, esperaba que hicieran muchas cosas diferentes. En este deporte, como cualquier otra carrera, abarcan muchas actividades diferentes y ser competente es imperativo para el éxito.  Quizás no todo jugador mejoró en todas las actividades, en realidad probablemente no mejoró, pero quería que todos los jugadores reconocieran su mejoramiento. Quería que comprendieran que aunque salen de la arena sintiéndose miserables, o llegan a la casa después de un día terrible, pero probablemente se hizo progreso. En la cancha, se puede convertir en el mejor jugador. Quizás hay áreas del juego que no fueron  iguales al día anterior, pero cada jugador pudo ver su mejoramiento.”

Y así es. Un poco de mejoramiento cada día al cabo de tiempo resultó en mucho éxito. Solamente requirió perseverancia, y ánimo.

Un niño que tiene problemas de motivación probablemente es un niño que esta desanimado. Use un poco de ánimo cada día.  Haga que su hijo piense que cada logro, sin importar el tamaño, con esta táctica comenzara a ver a niño motivado.

Simpatía: La simpatía es otra capacidad emocional importante, que les falta a algunos niños. Cuando un niño no puede sentir este sentimiento, su vida será difícil,  para el niño y las personas a su alrededor.  Cuando los niños no tienen simpatía tienen dificultad conociendo amigos y llevándose bien con otros. Para estos niños la escuela se convierte en un lugar desagradable porque raramente reciben ánimos o cuidado de otras personas. Este niño está a riesgo de fallar y dejar la escuela. Estos estudiantes también son los que toman parte en conductas de alto riesgo.

Un padre puede ayudarle a su hijo enseñándole como tener simpatía. Pregúntele como otros se sentirían usando situaciones probables, por ejemplo cuando se burla o toma ventaja de alguien. Por otra parte, los estudiantes que son más populares, son los que entienden los sentimientos de otros y pueden relacionarse con ellos.

Capacidades Sociales: Finalmente, los mejores estudiantes en la escuela son los que tienen capacidades sociales. Estos niños tienen la capacidad de llevarse bien en grupos. Estos no esperan que siempre sean el centro de atención porque son bien recibidos por otros, por eso, la popularidad siempre llega a ellos. Esos son los estudiantes que tienen genuino interés en la felicidad y bienestar de otros.

Los estudios demuestran que los estudiantes que son rechazados socialmente en la escuela elemental tienen una probabilidad de dejar la escuela tres veces más alta.

Por eso los padres pueden darle una ventaja a sus hijos comunicándoles la importancia de desarrollar las destrezas emocionales.

Muchas veces estas destrezas pueden ser aumentadas con solo ayudar a que su niño aprenda a parar y pensar acerca de los resultados que sus acciones causaran en la situación.

USA Today reporto que en los ochentas “los padres tomaron menos de siete minutos a la semana hablando con sus hijos.” No es posible hacer lazos con su hijo en tan poco tiempo, y sin este proceso es probable que el niño no le haga caso a los consejos de sus padres.  Tome tiempo para estar con sus hijos, ayúdele a llegar a comprender la importancia de desarrollar capacidades en las cinco áreas emocionales. Se recomienda los siguientes ejercicios durante el “tiempo especial”:


1.    Tome 20 minutos diarios para estar con su hijo haciendo algo que es interesante para el niño. Es importante acercarse al niño y decirle cosas como “Pienso que no hemos tomado mucho tiempo juntos y tú eres muy importante para mí. Tomemos mas tiempo juntos todos los días. ¿Qué te gustaría hacer?” Es importante recordar que el propósito de este tiempo es de hacer una conexión empática y una relación con su hijo. Trate de hacer este tiempo positivo.

2.  Durante tiempo especial no debe de haber órdenes paternales, ni preguntas (del tipo evasivo), y no debe dar direcciones. Esto es muy importante. Este tiempo es el de hacer una relación, no de disciplinar comportamiento difícil.  Si, por ejemplo, está jugando un juego (Valga redundar) y el niño comienza a hacer trampa, usted puede redirigir su conducta. Puede decir algo como, “Veo que has cambiado las reglas del juego, voy a jugar por tus reglas.” Recuerde que la meta del tiempo especial es mejorar las relaciones entre el padre y el hijo, no de enseñar.  Por supuesto, en otras ocasiones, si su hijo hace trampa es importante de tratar la situación.

3.  Note el comportamiento positivo, esto es más productivo que notar lo negativo.

4.  Escuche mas y hable menos.

LA NUTRICION


La nutrición apropiada mejora el aprendizaje.  Los aminoácidos preparan para su día. Los ingredientes en las proteínas son importantes.  Dietas con alta proteína y bajos carbohidratos son mejores para el aprendizaje, especialmente para los niños con problemas de atención. Estas dietas tienen efectos estabilizadores en los niveles de azúcar en la sangre y ayudan con el nivel de energía y concentración.

Para el desayuno, recomiéndele a su hijo que coma frutas frescas (el azúcar fructosa se deshace mas despacio en el cuerpo y prolonga la energía) y alimentos con proteína con baja grasa como el yogur, avenas, huevos, requesón, jamón, etc.  Desanímelos a comer carbohidratos simples porque suelen causar somnolencia, porque causan la liberación de la seratona, que causa el sueño.

Las mejores comidas que puede comer durante el almuerzo son las ensaladas, vegetales frescos, proteínas, carnes bajas en grasa como el atún, el pollo, y el requesón.
Recomiende que no coma carbohidratos simples por la misma razón.

Un buen menú para la cena consiste de una ensalada, frutas frescas, proteínas bajas en grasa, y carbohidratos como los fideos,  las papas,  el arroz y el pan.

El mejor tiempo de comer carbohidratos simples, que suelen ser los favoritos de los niños, es durante la merienda. Estas comidas suelen ser golosinas como las galletas, el cereal, las papas fritas, etc.

Un estudiante que está mal nutrido no se concentrara tan bien, y no aprenderá tanto.

DESCANSO

El tercer ingrediente importante es el buen descanso. Cortar el descanso por dos horas, su habilidad de recordar puede ser disminuida al día siguiente.  Dormir, le da a su cerebro tiempo para corregir problemas,  ordenar lo que tiene que hacer el día siguiente, y aumentar la memoria.

Para poder hacer esto, el cerebro necesita un buen descanso. Esto significa que usted debe poner a su hijo a dormir en un lugar donde se sienta seguro y querido. Los estudiantes que viven en familias abusivas o con mucha tensión están en alto riesgo porque la ansiedad interfiere con el descanso.  El niño puede dormir, pero no obtiene el sueño de tipo profundo que requiere.

Los maestros nos dicen que muchos estudiantes necesitan mejor descanso o mejor calidad de sueño.

Finalmente, llegamos a donde comenzamos. Los padres hacen la diferencia. Tienen un papel vital en asegurarse que sus hijos lleguen a la escuela en un estado conductivo al aprendizaje. Un niño que es inmaduro, mal nutrido, o insuficientemente descansado no será exitoso en sus estudios. Por otra parte, el niño que es contento, descansado, y alimentado nutritivamente, es un niño listo para aprender.